abril 19, 2017 | 2 comentarios |
A veces las ocupaciones del día a día nos alejan de cosas tan importantes como cuidar nuestra alimentación. Llegamos muy cansados y no tenemos ganas de ponernos a cocinar ni de pensar platos saludables para la cena (y menos para el día siguiente). Al otro día en el trabajo, al almorzar, no tenemos nada para comer y recurrimos a la comida rápida o salimos a comer y terminamos gastando más dinero por semana. Por eso hoy te dejamos algunos tips para comenzar a llevar viandas saludanles preparadas en casa. Un poco de esfuerzo extra puede significar un cambio importante en tu alimentación y, por ende, en tu calidad de vida.
1) Foco en la motivación
Salud, dinero y sabor: a la hora de mantenernos motivados en la preparación de viandas debemos concentrarnos en lo bien que nos hará tanto física como mentalmente, en lo positivo que es llevar un control sobre nuestra alimentación y en el claro alivio que supone a nuestra billetera. Y, por supuesto, en el sabor inconfundible que tiene la comida casera, en la cual además sabemos exactamente cuáles son los ingredientes.
2) Contenedores de calidad
Parece un simple detalle, pero es muy importante asegurarnos que nuestra vianda conserva bien el alimento. El contenedor ideal tiene que ser hermético, no solo para evitar pérdidas en alimentos más líquidos sino para que la comida llegue lo más fresca posible al almuerzo.
3) Ser balanceados
Aquí está la clave de toda alimentación saludable: menús balanceados. Las viandas deben incluir por lo menos una fruta, vegetales varios, proteína y una porción de carbohidratos. Lo más importante es no abusar de ninguno sin tener a los otros en cuenta.
4) Buscá un compañero
Encontrar un cómplice que no se deje tentar por las salidas o la comida chatarra es especialmente bueno si queremos incorporar este hábito. Se motivarán entre los dos (o más) e incluso pueden mantenerse comunicados y recordarse las viandas.
La falta de tiempo suele atentar contra la alimentación saludable. ¡Te ayudamos a organizarte!
Cocinar extra para la cena: Una buena estrategia para no olvidarnos y que no nos dé pereza hacer comida específicamente para la vianda es, simplemente, hacer más comida a la hora de la cena. Pensá que tenés un invitado imaginario que se quedará a cenar y asegurate de hacer una porción de más y guardarla para el próximo almuerzo.
Inmediatamente después de cenar: Siguiendo la recomendación anterior, y siendo aún más prácticos, antes de lavar los platos de la cena, guardá ya en tu vianda esa porción extra. Quizás de mañana estés demasiado apurado para prepararla.
Viandas de reserva: Una buena idea es tener un día semanal (quizás alguno del fin de semana, cuando tenemos más tiempo) en el que preparamos varias viandas “de emergencia”. De mañana no tendríamos más que sacarlas e irnos al trabajo. Podés guardarlas en el freezer para que se conserven más tiempo.
Lista de recordatorio: Aunque no es recomendable hacer la vianda en la mañana porque hay más posibilidad de olvidarnos o que no nos dé el tiempo, un truco para quienes lo hagan puede ser pegar una lista en la puerta de la heladera que nombre todas las cosas para armarla. De esta forma no se pierde tiempo en idear o pensar qué es lo que vamos a llevar de almuerzo.
Pensando en cómo debe ser una alimentación balanceada, te proponemos estas opciones que podés probar para llevar la próxima semana al trabajo.
Lunes: Pollo grillé con ensalada mixta. De postre, una banana.
Martes: Pescado, arroz integral y vegetales hervidos. De postre, una manzana.
Miércoles: Pasta con verduras saltadas. De postre, dos mandarinas.
Jueves: Ensalada de atún con arroz. De postre, una naranja.
Viernes: Lasaña de verdura. De postre, cinco frutillas.
Algo importante para dar a la alimentación su verdadera importancia es realmente tomarse un tiempo para el almuerzo, no comer a las apuradas en el escritorio. Y por supuesto, tomar un desayuno nutritivo te ayudará a que el almuerzo sea más satisfactorio.
Y para que toda la jornada disfrutes una buena alimentación; en las comidas entre horas optá por snacks saludables en lugar de harinas o golosinas (acá tenés muchas ideas). Y siempre, mucha agua o jugos naturales durante el día para mantener una buena hidratación.
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Día Mundial Sin Humo de Tabaco - WorkGym
[…] en la visión de todas las empresas. Es crucial que se incentiven los hábitos saludables como la alimentación balanceada, el ejercicio, y por supuesto, el estar libres de humo de tabaco. ¿Pero cómo hacerlo? Acá van […]
31 mayo, 2017 at 4:19 pmAlicia Puglia
Buenos tips chicos, también existe la opción para los que no tienen tiempo de hacerlo de comprar viandas proteicas o viandas fit para deportistas. Les recomiendo las que preparan en comidas como en casa. Saludos y buen blog 🙂
21 agosto, 2018 at 3:19 am